Te contamos los ocho errores más comunes que pueden conllevar una inspección de Hacienda
¿Temes que algún día Hacienda te comunique una inspección? La falta de conocimiento y la convicción de que «a mí eso no me va a pasar» lleva a muchas empresas a cometer ciertos errores que alertan a Hacienda de que no se está declarando todo lo que se debería.
Para que sepas qué hacer y qué no hacer a la hora de poner las cartas sobre la mesa con la Administración, hoy queremos contarte los ocho motivos por los que Hacienda hace inspecciones. ¡Vamos allá!
8 causas de una inspección de Hacienda
#1 Tu declaración de la renta ha salido a devolver una cantidad excesiva
Si tu negocio factura un beneficio considerable al año, será raro que la declaración de la renta te salga a devolver, y será aún más raro que la cantidad sea muy alta. Por lo tanto, si al realizar alguna declaración tributaria (IVA, renta…), la devolución es elevada, saltarán las alarmas de Hacienda. Esto también puede ocurrir en el caso de particulares con patrimonio elevado, no solo a empresas.
#2 Hay un descuadre entre los modelos trimestrales y los anuales
Este error no suele ser intencionado, sino, simplemente, un error. En Viola Pérez siempre recalcamos la importancia de contar con un asesor fiscal que calcule correctamente los modelos tributarios para que no recibas ninguna multa o inspección. Cuando a Hacienda no lo cuadran los modelos trimestrales y anuales, iniciará una inspección. Tanto si el error es intencionado como si no, no te librarás del mal trago. Por lo tanto, te aconsejamos que, si aún así quieres hacer los modelos personalmente, te fijes, y mucho, en que hayas calculado bien las cantidades.
#3 Solicitaste el NIF intracomunitario y Hacienda no entiende por qué
Este tipo de inspecciones son más bien para comprobar los datos. Si solicitaste el NIF intracomunitario, Hacienda querrá saber por qué, y tendrás que justificar la necesidad de tu NIF.
#4 Declaraste o no declaraste subvenciones
Aunque hay subvenciones exentas de tributación, algunas sí que se han de declarar. Por lo tanto, han de figurar en la renta correctamente.
#5 Dejaste una sociedad inactiva
Dejar sin actividad una sociedad y crear otra parecida, con los mismos socios, misma actividad y misma sede, está dando más que pistas a una posible inspección por parte de Hacienda. Además, cuidado con cerrar una sociedad que tiene deudas si eres el administrador: Hacienda podría obligarte a saldar esas deudas con tu patrimonio personal.
#6 No presentar la declaración de la renta
A no ser que tu salario anual sea menor a los 22.000 euros si proviene de un pagador o a los 14.000 si proviene de dos, tendrás que realizar la declaración de la renta. Y, si no, lo haces Hacienda se te echará encima. Sí o sí.
#7 Presentas demasiados gastos deducibles en tu renta y Hacienda se huele por qué
A veces, nos llegan clientes al despacho que intentan deducirse gastos que nada tienen que ver con la empresa, como cenas en restaurantes que intentan pasar como cenas de negocios o la gasolina de su vehículo personal. Si Hacienda se da cuenta de esto, hará una inspección, pues aunque puedas deducirte, por ejemplo, la luz y el agua de tu oficina, no puedes hacerlo de la vivienda habitual durante las horas no laborables en el caso de que uses tu casa como lugar de trabajo.
#8 Compraste mucho material para trabajar pero declaraste pocos servicios
Donde Hacienda lo tiene más crudo para pillar a los negocios que intentan evadir impuestos es con los electricistas, fontaneros, artistas y, en general, todos aquellos que trabajan directamente con el cliente final. En los casos de estos profesionales, como pueden cobrar en efectivo en la misma casa del cliente, es muy complicado saber cuándo y dónde han realizado una obra o un servicio.
Pero Hacienda, como no, tiene sus trucos. Uno de ellos es investigar si un fontanero, por ejemplo, ha adquirido mucho material para trabajar (como herramientas) pero ha declarado solo tres o cuatro servicios. Si Hacienda decide investigarlo y ve que ese fontanero ya no dispone del material comprado, eso significa que lo ha utilizado más de la cuenta, así que está defraudando. Lo mismo ocurre con los pintores: si han adquirido y gastado mucho material, se les puede pillar por ahí. Claro que estos casos solo se dan cuando la avaricia rompe el saco y los profesionales declaran estos gastos para deducirse de la renta. Si la adquisición de los materiales es por cuenta propia y en B, es aún más complicado, a no ser que haya facturas que prueben que se han llevado a cabo.
Por lo tanto, si eres uno de estos profesionales, ojo con posibles inspecciones sorpresa de Hacienda.
#BONUS | Tienes la cuenta bancaria abandonada
Otra de las razones de que nos inicien un proceso de investigación es tener la cuenta bancaria abandonada. Si el contribuyente no gasta apenas nada de lo que ingresa, queda claro que el dinero está llegando a sus manos en efectivo y sin declarar, porque le está bastando usarlo para el día a día.
En estos casos ni siquiera hace falta que Hacienda investigue qué ingresos fraudulentos está percibiendo el profesional: el simple hecho de que una persona pueda vivir sin sacar dinero de su cuenta carece de sentido común y es prueba suficiente de que se están evadiendo impuestos.
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